Es tan terrible ver amanecer...
ver esos hermosos rayos iluminar el cielo
el sol matutino saliendo del oscuro oriente
y la luz, quemando el frío nocturnal.
Es tan terrible, algo tan hermoso
es horrendo sabiendo que es un inicio
el inicio de un despertar...
y el final de un sueño.
Sueños que nacen en una madrugada
al son de estrellas y voces nocturnales
y al filo de la noche incordia
renacen tus ojos claros, ojos infinitos.
Y al pasar el tiempo...
un tiempo que se detiene
y transcurre soñando
hasta pasar la noche, a una entrante madrugada.
Soñando con jardines, rosales y grandes campos
soñando junto a ti, abrazándote, besándote
sin mas preocupaciones y sin temor a la morada
soñando pasamos grandes montañas.
Tomado de tu mano
transcurriendo largos momentos
protegiéndote en mi fortaleza olvidada
protegiéndote a capa y espada.
Guardándote de pesadillas
acariciándote, mimandote
así transcurren mis sueños
así es como desearía seguir viviendo.
Volando junto a ti, grandes galaxias
brincando planetas, buscando tranquilidad
moviendo a nuestro parecer las estrellas
y contemplando la vida en otro universo.
Alterando las leyes de la ciencia
haciendo posible lo inexistente
creando obras omnipotentes
siendo nosotros, nuestros propios Dioses.
Creando melodías de gozo y tranquilidad
alterando la luz... la realidad
así sueño distante, así sueño en silencio
sueño con una princesa, cuyo reino es infinito.
Mis sueños son tan gloriosos a mas entrada la noche
no existe miedo, ni desgracia
todo es luz...
todo es hermoso...
Y es por eso... que es terrible ver amanecer
Es tan horrendo despertar...
sabiendo... que no son míos tus labios.
Frank
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